Las Marcas no se crean de
la noche a la mañana, se construyen. La
Marca debe de tener como base el concepto “identidad”, el cual le da
credibilidad y legitimidad. La Marca debe expresar un concepto total, su
conocimiento se da a través de un plan comunicativo sustentable y sostenible.
Para la Marca Arequipa,
usemos el componente marca gastronómica, un buen ejemplo de lo que hay que construir. La cocina arequipeña, tiene en
sí una serie de elementos y complementos que necesitamos, conocer,
analizar, investigar, reconocer,
proyectar y marketear; todo pasa por ver como relacionamos agricultura, ganadería y
pesca, con cocina y gastronomía. Una idea fuerza en este sentido es recordar
que fuimos una cuenca lechera importante y la producción de leche y queso,
marcaron en la gastronomía arequipeña reconocidos productos de nuestra “carta”. En igual
sentido, reconocemos la influencia de dos productos nuestros con
características especiales, el ajo y cebolla. La presencia del camarón, se
resalta con leche, queso, ajos, cebollas, ají, que con otros ingredientes, nos dan más de 40 platos diferentes. Una carta gastronómica no es una simple
enumeración de “productos”, en Arequipa tenemos aperitivos, chichas, entradas
frías y calientes, la carta fuerte viene en plato hondo, se le llama chupe, muchas
exquisiteces van en plato tendido, siguen los postres fríos y calientes con un remate
final, bajativos con nombre propio. Arequipa es parte también de una importante
producción de uvas, consumida más en
forma de pisco y vino que en mesa. Nuestra tradición pasa también por la
panadería y pastelería. Finalmente, la “picantería” es una institución
gastronómica nuestra que requiere atención. No es solo carta, la “Marca Gastronómica” es más, la “Marca Arequipa”,
mucho más.