viernes, 30 de agosto de 2013

PLAN MAESTRO DE TURISMO

Nuestros recursos, atractivos y productos turísticos, dan sentido a querer ser un destino turístico importante; contar con un Ministerio propio, se presenta como un atractivo necesario. La noticia viene colgada a partir de la generosa entrega del Plan Maestro de Turismo para Arequipa, donado por la USIL. Esta nota tiene un atractivo eminentemente turístico. Veamos lo que somos y tenemos. 10,000 años, son toda una vida de expresiones que hoy los vemos en lectura arqueológica, arquitectónica, histórica; las huellas de ese pasado pre Inca e Inca nos marcan metro a metro esa presencia. El mestizaje y sincretismo colonial hizo lo propio incorporando expresiones de religiosidad que hoy los tenemos como arte, arquitectura y práctica religiosa. Todo este proceso generó una cultura viva que sigue activa con su música, danza, vestimenta, creencias, ritos, sabores y olores de una culinaria y gastronomía, que va cobrando posicionamiento desde las cocinas regionales, hasta la gran cocina mundial. Este es un campo de expresiones humanas tan rico y diverso, como lo es nuestra geografía; nuestros parques nacionales, reservas y santuarios, muestran un paisaje natural pintado al detalle, allí vemos que gran parte de la biodiversidad existente en todo el planeta la encontramos aquí; el Perú es un cuadro de encuentro con la naturaleza, donde la imaginación cobra vida. Este patrimonio natural, monumental, artístico, cultural, lo hemos ido incorporando en nuestra legislación protegiéndolos de todo efecto destructor y depredador; no olvidemos que, querer ser destino turístico nos obliga a ello. De otro lado, nuestros innumerables recursos, necesitan ser convertidos en atractivos, para lo cual no basta decirlo, hay que inventariarlos, evaluarlos y jerarquizarlos; estos necesitan tener condiciones para su accesibilidad y gestión; por lo que, pasar a la fase de tener productos turísticos, implica mayores incorporaciones en términos de servicios, acondicionamientos y gestión profesional; ser un un destino y tener dentro, destinos turísticos, nos marca en una escala mayor, el cual necesita incorporaciones que marquen sostenibilidad y sustentabilidad de gestión en todo el sector; visto así, su incorporación en el circuito mundial del turismo, obliga a tener gestión especializada a través de un sector gubernamental independiente y no ser un simple vice ministerio. Tenemos patrimonios reconocidos por la humanidad y hemos incorporado otro galardón y a la vez responsabilidad, como lo es, la maravilla de Machu Picchu. Finalmente, una ley general de Turismo, normativas que tengan escalas de competencia que vaya del Gobierno central, regional y local, con capacidades de promoción, protección, regulación, operación; reglamentos concordados para hoteles, restaurantes, agencias, guías, transporte, acuerdos concertados con operadores privados, centros de formación de profesionales en turismo, desactivación de autoridades autónomas y, construcción de entes vinculantes entre Ministerio de Cultura, Ambiente y “Turismo”; deben de ser referentes obligados para el manejo del sector. Por esto y muchas cosas más, el Turismo necesita un Ministerio.

jueves, 22 de agosto de 2013

LAS FIESTAS DE AREQUIPA

Ya son muchos los años que “las fiestas de Arequipa”, no son lo que se quiere, dejaron de ser bonitas o simplemente, perdieron sentido. No son un producto concertado, que a partir del Municipio o instituciones acreditadas, tengan sostenibilidad y sustentabilidad. Vemos propuestas que, año a año, solo suman y suman, pero que no dan idea de un concepto cultural que sea parte de la “Marca Arequipa”. Haremos el intento de dar cuenta de una evaluación, no todos los eventos están, pero ahí vamos: Las TUNAS son un producto que mantiene la tradición pero urge de un cambio referido a presentación y repertorio. Las SERENATAS se presentan cada vez más riesgosas, no ofrecen seguridad, la descentralización es una buena iniciativa. El concurso de fierro forjado, sillar, cuero, está bien, pero no hay una estrategia que genere una mejor cobertura para que esta alternativa ocupacional artística, no tienda a desaparecer. El festival de guitarra internacional, bueno. FESTIDANZA, es una actividad que necesita un nuevo concepto; tenemos múltiples expresiones de música y danzas de todo el Perú. Las danzas extranjeras, respetables, no ofrecen nada mejor que lo nuestro en vistosidad, elegancia, rutinas y mensajes; hace tiempo que no hacemos el intento de recuperar folklore para conocerlo, entenderlo y quererlo como nuestro, además, para compararlo. Nuestras danzas son de desplazamientos abiertos y funciona bien, en cambio, muchas de las extranjeras son de corta rutina y poco desplazamiento. Años atrás se hacía a nivel escolar, La Ñusta de Oro, buen recuerdo, ¿qué pasó? La Región ha creado un evento llamado, PASACALLE, que es la expresión de las regiones en música y danza, puede ser mejor. La entrada de Ccapo, evento tradicional organizado por el Municipio de Cayma, solo debe ser eso. El CORSO DE LA AMISTAD, necesita un cambio total; es ¿alegórico?, por los vehículos que llevan en sí elementos más comerciales que artísticos, el tema de la música y danza, año a año genera disputas de que debiera estar y que no, la evaluación siempre es, cuanta más o menos sayas ha tenido, cuanto más o menos dura y a qué hora acabó, que tan ordenado o desordenado ha estado, además, quien impone auspiciadores y con cuanto se portan para el evento. Este es un evento en espacio abierto que debe tener una “ruta” definitiva, con todos los parámetros para aforos masivos. El Corso cobró interés comercial y económico, pero perdió esencia y expresión. Pensando en las danzas, quienes le dan vida al Corso, son en su mayoría universitarios y estudiantes de institutos; hacer un FESTIVAL DE MUSICA Y DANZAS DE AREQUIPA Y EL PERU, solo para universidades e institutos, caería bien, tendrían su día. También, si la idea es hacer alegoría, hagan un CORSO ALEGORICO estrictamente comercial, las empresas tienen posibilidades para lucirse y lo pueden financiar, necesitan tener solo su día. La FIA, no puede marcar la pauta de fiesta en Arequipa, es la ciudad quien lo marca; dicho sea de paso, la FIA, también perdió sentido en lo expositivo, comercial, musical e innovador, no generó imagen de variedad, sorpresa y atractivos. La idea es que se encargue la formulación de una “propuesta” que cambie estilos, usos, recupere, reformule e innove, que sea una propuesta cultural, en base a una “Agenda Cultural”. Somos una ciudad destino turístico, queremos ser la capital de los eventos, tenemos un acervo cultural impresionante; pero, hace falta el sacudón, necesitamos asumir y asimilar el defecto, para lo cual la propuesta, concertadamente, tiene que conocerse, aceptarse y hacerse.

jueves, 15 de agosto de 2013

AREQUIPA Y SU PARQUE AUTOMOTOR

Afirmar que Arequipa es la ciudad del millón de habitantes, resulta hoy de lo más evidente, no pretendemos cargarle ninguna categoría ni denominación como, metrópoli, urbe, o algo que se le parezca. Hablar de su parque automotor es ya un tema de cuidado, hay más de 190 mil vehículos, decirlo no debe de sorprender a nadie, reitero, la evidencia está a ojos vista. Hagan cálculos de la relación población/vehículo y les va a dar que por cada 5 habitantes hay un vehículo, ¿este dato indica una desproporción?, puede ser, el ejemplo de Lima nos puede marcar algo parecido; creo que necesitamos analizar este tema, ver a Arequipa y su parque automotor, pero desde una perspectiva que ayude a su solución. Usemos indicadores que dan cuenta de procesos, esta es una buena entrada metodológica para entender que el tema, es realmente un problema. La población de la ciudad Arequipa tiene una tasa de crecimiento positiva (2,4 tasa anual), cada vez somos más, a pesar de haber disminuido el ritmo de crecimiento. Este crecimiento se ve reflejado también por la cantidad de viviendas, aquí se hace evidente el proceso de urbanización, donde “invasores e invasiones”, marcan el distingo. Hay zonas de mayor crecimiento, el cono norte, es un ejemplo notorio. Otro indicador importante son los servicios de la ciudad, poco a poco en los últimos años, hemos sido testigos de cómo Arequipa ha ido cambiando su paisaje urbano, eso de ciudad pequeña, muy de provincia, quedó como pasado, hoy en día ya hablamos de grandes centros comerciales, zonas de diversión, zonas dormitorio, zonas productivas, de servicios, etc. A esta rápida lectura de ciudad, tenemos que agregarle, el parque automotor con 30% más el último año. ¿Qué fue de la infraestructura y equipamiento urbano de Arequipa?; que pasó, de quien es competencia, ¿de los Municipios Distritales, del Provincial o del Gobierno Regional? Cuanto nuevo tenemos, que signifique, nuevas y más calles, avenidas, anillos viales, puentes sobre el rio Chili, pasos a desnivel, accesos y salidas de la ciudad, vías rápidas, etc. la infraestructura, se quedó para una Arequipa de medio millón de habitantes, así de simple. El equipamiento urbano también fue dejado de lado. El espacio público lo acondicionaron más al vehículo que al peatón o usuario, más ancho de pistas, menos ancho de veredas. Hay más semáforos, sí, pero nadie les hace caso, no cumplen objetivos como es regular los flujos vehiculares; y hay algo más que llama la atención, sencillamente la Policía abandonó la ciudad, ¿dónde están, que hacen, cuál es su plan operativo?, no hay nada de nada. En fin, el crecimiento marcó indicadores de consumo, o sea, “más vehículos”, pero el crecimiento no generó más infraestructura y equipamiento urbano, ¿seguiremos esperando? Entendamos algo, ante una mala gestión de movilidad urbana y un peor servicio de transporte público, es lógico que la creciente necesidad de movilidad sea fácilmente resuelta con un ingreso per-cápita mayor (más vehículos), más aun, si el servicio público es inseguro y malo. Entonces nuestro exagerado crecimiento de parque automotor es un signo de detenimiento del desarrollo de la ciudad. Pues lo que debiera crecer y desarrollarse es el servicio de transporte urbano, así habría, menor compra de vehículos particulares, menor demanda de vialidad, menor congestión, menos gasto de ese ilusorio canon, y, contrariamente, tendría que haber, mayor inversión en hospitales, educación, seguridad. Necesitamos inaugurar hospitales, colegios, parques, exposiciones, etc. ¿Dónde está la falla?

sábado, 10 de agosto de 2013

SOBRE EL AREQUIPEÑO

Estamos a pocos días de celebrar nuestro aniversario, me anticipo un poco tratando de marcar algunas ideas sobre Arequipa. El arequipeño se ha hecho conocer como el revolucionario, el hombre orgulloso de su tierra, ha llegado a ver y creer a Arequipa como una república independiente, además..…., etc. ¿A qué se debe esto, porque adopta este pensamiento, esta manera de ver? Desde el punto de vista de los personajes, asumamos conceptos de líderes y caudillos, su imagen, verlos desde el escenario de los movimientos sociales, partidos políticos o instituciones. Figuras como Mariano Lino Urquieta, Francisco Mostajo Miranda, marcan un referente; uno médico el otro abogado, son de pensamiento distinto y acción diferenciada, pero con objetivos que coincidían, cuando se referían a Arequipa. También tenemos a José Luis Bustamante y Rivero, quien inspiró y armó el Frente democrático, que junto con otros Arequipeños, plantearon un ideario, siempre tan necesario para la construcción de país. Cambiando la mirada en el retrovisor, ubicamos a los militares, eran los que armaban la revolución, con ellos, sin ellos o contra ellos, y estas tenían la categoría de acciones insurgentes, protesta, golpistas, etc.; se les daba el cliché de revoluciones y revolucionarios; aquí de muchas ocurridas, tuvimos “la revolución del cincuenta”, acción provocada contra el general Odría, quien a su vez fue el que destituyó a Bustamante y Rivero, siendo todo esto una historia muy conocida nuestra. En fin, hay muchos hechos que revisar y rescatar; hoy, pretender llevar conceptos históricos en lo político y social, a estrategias nuevas de movimientos regionales y pretender darles denominaciones de origen como, arequipazos, moqueguazos, baguazos, etc., ya es otra historia. El arequipeño si realmente conociera su origen, acerbo, expresiones y todo lo que tiene, se sentiría orgulloso de decir, soy arequipeño. No se ha hecho esfuerzos por tener una identidad que sea producto de haberla construido, preservado y cultivado. A nuestros alumnos del colegio, por ejemplo, ¿qué les enseñamos sobre Arequipa? Como se ven temas referidos a: arqueología, historia, geografía, literatura, folklore (música, danza, culinaria, gastronomía, artesanía), turismo, recursos, etc., poco o casi nada, sería el indicador. Nos quejamos los arequipeños de haber sido invadidos por migrantes, al extremo de señalar que somos minoría; pero, no hemos sido capaces de crear condiciones para tener una “identidad de lo arequipeño”, que, a propios y extraños, debiera servir para formarnos con valores, porque esta tierra que no solo es un territorio, sino, una multiplicidad de expresiones que dicen mucho de lo nuestro; insisto que este tipo de iniciativas formativas, debe de partir desde la escuela. Se quiere lo que se conoce y por ello se le cuida. La revolución que necesitamos es la de formación y educación, la de los valores; “ser arequipeño” tiene que ser un valor y no una denominación de origen. Necesitamos formarnos en mejores actitudes, debemos dar valores agregados en capacidades, formación y “sentir arequipeño”; nos lo exige el presente y futuro, el mercado, nuestra región, nuestro país. Finalmente, necesitamos crear revolucionarios que sepan que el cambio es mejor que mantener e inclusive, mejorar el statu quo. Somos una región que crece y que tiene que hacer mucho esfuerzo por cambiar y mejorar; hay múltiples formas de hacer empresa; los arequipeños, lo hemos demostrado más de una vez, sigamos en el propósito, vale la pena.

domingo, 4 de agosto de 2013

LA INDUSTRIALIZACION ANUNCIADA

Del discurso del Presidente el pasado 28 de julio, me quedo con un anuncio: Perú, país industrializado. Ollanta Humala hizo el anuncio y uso conceptos como: la brecha de productividad, necesidad de un plan nacional de industrialización, fomento al valor agregado, incentivos tributarios a las pymes y lograr estándares de calidad. A lo dicho, la “industrialización”, necesitamos verla fuera de un obligado discurso. Hay mucha literatura señalando la importancia de la industria; la industrialización aparece como la locomotora del crecimiento y desarrollo, su importancia se sustenta desde el origen del sistema capitalista, a partir del cual, la categoría de país industrializado, empata con la de país desarrollado; es el sector donde se transforma todo lo que son recursos y materias primas, que por diversos procesos pasan y terminan en productos intermedios o finales; en toda la transformación, se va marcando los “valores agregados”, indicador importante en toda economía. Nuestro país tiene una historia industrial que viene desde la formación de nuestro mercado interno y pasó por diversos procesos, como sustitución de importaciones, de exportaciones, etc., tiene etapas que van desde formas artesanales, manufactureras e industriales y se produce, bienes de consumo, intermedios o de capital. Mucho de las formas, modelos y políticas, no lograron consolidar, una estrategia de industrialización para nuestro país. La industrialización anunciada, necesita de elementos, componentes y soportes, sola es difícil que camine. Por ejemplo, la educación pensada en el desarrollo (educación para el desarrollo) es un aliado estratégico para la industrialización, las capacidades necesarias para la estrategia, vienen de una buena formación para el trabajo. La tecnología con capacidades, marca las productividades, siendo este el indicador de escenarios y mercados competitivos. El valor agregado señalado, tiene que ver con nuestra realidad, somos un país con mucha riqueza de materias primas, los cuales necesitan ser transformados en productos; pero, para que ello suceda, se necesita de recursos naturales, capital, tecnología, capacidades. La pregunta sale rápida, ¿cuánto de lo que se necesita, tenemos? La industrialización anunciada, necesita estar entendida y concebida, desde la perspectiva de tener un cambio de “matriz productiva”. Necesitamos que industria, pesca, agricultura, turismo, por ejemplo, sean tan importantes y estratégicos como la minería; dejar de ser minero-dependientes, juega bien, pero pensado en una diversidad productiva y de servicios. Esta estrategia de cambio, requiere tener de aliado a la educación, porque las capacidades son tan importantes como el capital y la tecnología; además, la exigencia de los mercados, marca la decisión de estrechar la brecha de productividad. Finalmente, nuestro mercado interno, las alianzas estratégicas, los TLC, han pauteando necesidades e indicadores para estar en la posibilidad de ser competitivos. La industrialización anunciada requiere de decisiones y compromisos, donde, “Estado-Capital-Trabajo”, sintonicen la necesidad de tener claro, “que” (producción), “como” (tecnología), “donde” (ubicación) y “cuanto” (mercados). Recordemos, el crecimiento tiene sus límites, el desarrollo con educación e industrialización, es una obligación histórica.