La agenda del sur puesta en debate. Necesitamos tener una visión compartida de lo que se quiere, esa es una idea para llegar a buen puerto. Un primer nivel es sintonizar lo público, emprendimientos privados, sociedad civil, ciudadanía y población en su conjunto, para lo cual, importa mucho tener las ideas claras de lo que se quiere, como hacerlo, con quienes, plazos y metas. Aquí el concepto clave es la articulación e integración, por ello la urgencia de tener “ejes articuladores” que no sólo son viales, sino, económicos, productivos, logísticos y servicios.
Es claro suponer que lo que se necesita es posicionar el Sur, es prioritario construir y tener una agenda para el desarrollo en la que se tome en cuenta, infraestructura, equipamiento, políticas sociales, calidad de vida, legitimidad de gestión, gerencia social, eficiente y eficaz, todo en un escenario ciertamente conflictivo; en fin, solo un propósito, queremos que Estado, capital, trabajo y ciudadanía, decidan “trabajar juntos”.
En el sur, Marcona, Matarani e Ilo, son puertos básicamente mineros, por eso necesitamos un Mega puerto para la macro región, y que este que sea multipropósito; la infraestructura vial ya está, los puertos secos, centros articuladores e integradores, hay que “hacerlos y conectarlos” y generarles “rutas económicas”. En la misma lógica, Brasil y Bolivia necesitan vías, puertos y nodos para sus negocios; nosotros, al margen de la “Haya”, necesitamos crear espacios competitivos en términos de infraestructura, equipamiento y logística, por ello, todavía el sur está lejos de ser un eje articulador e integrador; ¿será “Corío”, el referente de este emprendimiento estratégico que tanta falta hace y que todavía no le agarran el sentido de lo que se quiere?
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