miércoles, 11 de abril de 2012

RESCATE MINERO

Concepto muy mediatizado, a propósito de un rescate, a unos trabajadores, de una explotación minera informal, que recientemente sufrieron un encierro forzado, y que luego  fueron “rescatados”. No  más de esta noticia;  paso a una reflexión  sobre  minería  que tiene que ver con lo  formal, informal,  conflictos, secuestros, depredación, destrucción, explotación, evasión, canon, óvolo voluntario, exportaciones, contribución al PBI, política de inversiones, concesiones, licencias sociales, consultas previas, etc. Vale tanto la minería, que es necesario tenerla en boca, oídos y mirada, más  por lo negativo, que lo positivo y contributivo a nuestra economía, sociedad y país en general; creo que no;  escavemos el socavón.
En nuestro formato gubernamental, es el Estado, a través del Ejecutivo, quienes proponen una política  sobre inversiones y  sus sectores, llámese Ministerios,  los que ven el tema en especifico; luego,  los Gobiernos Regionales, quienes con mayor detalle, disponen de un plan de ordenamiento territorial,  priorizando usos, roles y funciones, tan necesarios para pensar en crecimiento  y desarrollo. El ejecutivo y legislativo, establecen las normas adecuadas, inscritos en principios democráticos y marcan instrumentos  de  gestión como son,  presupuestos participativos, licencias sociales, y hoy,  consultas previas. Visto así, el Estado en sus instancias y competencias, establece las reglas de juego, los inversionistas toman decisiones y   la población  tiene participación democrática; todo basado en un modelo económico, con una opción y estrategia política definida.
Pisando  suelo  y metiéndonos en el socavón, lo cierto es que, a la luz de todo lo visto, el Ministerio de Energía y Minas, poco ha coordinado  con el de Ambiente,  los  Gobiernos  Regionales no definen fronteras con el  Gobierno Central, el Ejecutivo mira de costado al Legislativo, a la  Sunat, parece que le interesa más la recaudación fácil y no ir a buscarla, sabiendo que hay mucho más por cobrar que recibir. De otro lado, desde la política interna y casera, hay un nuevo filón, que precisamente no es minero, y es la oportunidad  de hacer suyo el tema minero, pero  desde la política, con vocaciones ecológicas  y con guiones más de conflicto que de consenso.
Lo cierto es que  encontramos  situaciones  nada  funcionales, informales y conflictivas. Las condiciones para su gestión   están dadas;  la  población  tiene,  los presupuestos participativos, licencias sociales y consultas previas,  el inversionista, un país en crecimiento sostenible y con ansias de desarrollo; de parte del Estado, una macroeconomía en azul,  buena imagen y  posicionamiento  expectante; por lo tanto, ¿dónde está el problema? Es lógico suponer que resulta prioritario, formalizar la economía minera que está al margen de todo;  así, creo que todos ganamos, tanto  con exploraciones,  explotaciones, transformaciones,  aportes y valores agregados; acorde con  nuestras  capacidades, tecnología, posibilidades y estrategias de crecimiento y desarrollo. La historia negra de la minería, tiene que volverse verde y azul y no necesariamente, roja.
  

No hay comentarios:

Publicar un comentario