No siempre las primeras damas, esposas de los Presidentes de la República en ejercicio, han sido tan notorias y mediatizadas en su accionar. Quizás los medios de comunicación contribuyen a la presencia fuerte de las esposas, convertidas en primeras damas de la noche a la mañana.
María Delgado de Odría, la llamaban la Evita Perón Peruana, tuvo una labor poco beligerante y más de concordia social; Consuelo Gonzales de Velasco, al estilo del Gobierno Militar, la tuvieron con buen perfil. Violeta Correa Miller, segunda esposa de Belaúnde, fue dirigente de juventudes y comando femenino desde los inicios del partido Acción Popular, fue secretaria del Presidente. Pilar Nores, manejó con fuerza el programa, Por los Niños del Perú, en su primer gobierno; en el segundo, hasta donde pudo, tubo el programa Sembrando, y el Instituto Trabaja y familia a su cargo. Susana Higuchi, poca presencia de primera dama; Keiko Fujimori, hija, ejerció de primera dama, abriendo los ojos para futuras presencias políticas, tanto como Congresista y luego postulante a la Presidencia. Eliana Karp, mantuvo un estilo irreverente respecto de ciertos políticos y de cierta prensa.
Nadine Heredia, ha generado expectativa, no por acciones de Gobierno, no por la estrategia de inclusión social, sino por, la forma como actúa, dice, opina, relaciona, y la gala que hace de manejos mediáticos muy efectivos, su locuacidad y sostenible presencia al lado del Presidente, la diferencia, en razón de la poca verbalización y actuación de su esposo; tiene un rostro, filmable y caricaturizable, que la hacen ver siempre sonriente, no puede tener la boca cerrada. Estar siempre en boca de casi todos le gusta, ¿durará? Feliz día internacional de la Mujer, mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario